El compositor canadiense Barry Truax propuso una definición de horizonte acústico como el límite al interior del cual opera la comunicación acústica. Luego, Martin Daughtry, musicólogo estadounidense, dividió esta sección espacial en cuatro círculos concéntricos según la distancia al escuchante, sosteniendo que en el círculo más alejado, la zona que llama audible-inaudible, es la imaginación la que completa la información de aquellas señales que, por efecto de la distancia, no se lograron comunicar.

Aun creyendo plausible el hecho de identificar categorías al interior del horizonte acústico, resulta discutible representar estas superficies de manera continua y homogénea, invisibilizando la posibilidad de un tejido poroso y discontinuo, aun al interior de este contorno de lo audible. Para desarrollar una idea crítica de horizonte acústico, utilizo el concepto de entidad sónica, entendiendo que ofrece una categoría distinta al objeto sonoro, pues en su alcance y circulación a escala geográfica aparece más bien como un arreglo de objetos sonoros.

Esta definición de entidad sónica es coherente con la definición de arreglos espaciotemporales de Harmut Rosa en su teoría de la aceleración social, la acción de fuerzas audibles y no audibles que se fijan a un lugar sonoro. Es decir, experiencia de escucha y horizonte de expectación plegados a un significante acústico que transmite una seguridad ontológica del ser, mas no necesariamente desde aquello que suena.

Para poner un énfasis práctico a esta discusión, se presentan algunos resultados obtenidos del proyecto “Entidades Sónicas de la Reserva Natural Pilunkura” ejecutado en colaboración con Pascual Alba la localidad de Pilolcura, financiado por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes, Fondart Regional de Los Ríos 2023.

Email: contacto@horizontesacusticos.cl

Otoño

“El lonco Pascual Coña en “Testimonio de un Cacique Mapuche”, se refiere a que los antiguos no usaban el calendario y no tenían meses lunares como los que los que manejamos nosotros ahora. Ellos se manejaban acerca de los quehaceres de la temporada, ese era el calendario, se regían por el calendario que observaban según lo que iban haciendo. Por ejemplo, Wesha antü era el tiempo de las escaseces en pleno invierno, Füchá filla eso es ya la salida del invierno, cuando escasea todo, ya todo se ha sembrado y quedan muy pocas cosas a qué echar mano. Luego de eso viene el Pewün, el brote, eso que se sembró ya está saliendo. Dentro del Füchá walën, esto sería febrero, marzo, hasta fines de abril, se guardan las cosechas. Es la época del Entupoñün” (Entrevista a Pascual Alba, 19 de marzo de 2023).

Invierno

Valdivia es una ciudad lluviosa, en la década del 90 el promedio anual de agua caída fue de 2500mm. Lo mismo obtuvo el colono alemán Carlos Anwandter entre los años 1856 y 1863, en lo que corresponde a la primera medición pluviométrica realizada en Valdivia. Respecto de estos temporales señala: “No suelen ser ni fuertes ni de duración; pero sucede frecuentemente, que, con un solo golpe, más o menos fuerte, todo pasa” (Carlos Anwandter, 1866).

En octubre de 1999 grabé el sonido de un fuerte aguacero sobre la localidad de Niebla, en la costa de Valdivia. El audio fue escuchado el 21 de junio de 2023, durante una entrevista grupal realizada en Pilolcura. Los testimonios que aquí se presentan son la reacción a aquella audición.   

Primavera

A propósito de indicadores sonoros, el investigador boliviano Richard Mujica señala que “el inicio de la actividad de cultivo que mencionamos, si bien tiene una temporalidad asignada, depende de otros factores para iniciar en un tiempo y lugar específicos. Estamos hablando de la importancia de los indicadores, nombre con el cual los pobladores de Chari llaman a las señales de la naturaleza que se presentan en el lugar. Los animales y los seres no humanos son quienes dan la señal e indican los detalles necesarios para proceder con cada momento y/o actividad agrícola. Queremos distinguir la palabra indicador y su relación con las agencias de los seres involucrados (…) estos no son representaciones de creencias o criterios meramente subjetivos. Al contrario, asumimos como tal, el sentido relacional e inter-dependiente que involucra la facultad de los indicadores sobre nuestras decisiones y formas de accionar” (Richard Mujica y Freddy Quispe Llanos, 2022). 

Verano

¿Cómo suena una carretera que aun no se construye? no es una pregunta retórica, el horizonte interpretativo o el horizonte de expectación del sonido en un determinado proyecto vial, es la premisa de cualquier persona que adhiere voluntariamente a una consulta ciudadana. Luego, si admitimos que es complejo anticiparse al tipo de experiencia de escucha producto de una excitación sonora que aun no acontece, en qué descansa esta confianza ciudadana respecto de nuestra predicción técnica, legal o normativa? ¿Cómo se forjó esta manera correcta de construir nuestros entornos sonoros? ¿Es la calidad acústica de los entornos parte de la negociación de las comunidades en proyectos que enfrentan problemas de movilidad, conectividad y acceso a los servicios?